COMUNICADO DEL CSOA LA MORADA EN EL PRIMER ANIVERSARIO DE SU DESALOJO

Chamberí (Madrid) a 20 de abril de 2017

El CSOA LA MORADA fue un centro de barrio, autogestionado por vecinos y vecinas, donde se desarrollaban actividades culturales, solidarias y reivindicativas, abiertas y gratuitas. Comenzó su andadura en 2012 en un antiguo edificio que llevaba más de 10 años abandonado. En 2015 el inmueble fue comprado al Banco de Santander por la inmobiliaria InmoGlaciar, estando ya ahí instalado el Centro Social desde hacía tres años. Tras la adquisición, esta inmobiliaria solicitó el desalojo del Centro, solicitud que fue denegada por el juez en octubre de 2015. Al ver frustrada su petición, InmoGlaciar decidió actuar por su cuenta el 20 de abril de 2016 efectuando un allanamiento (al hacer una entrada forzada en un inmueble en uso), este delito
grave está penado por la ley con prisión de 6 meses a 2 años, a diferencia del delito de ocupación (o usurpación) que se es un delito leve pues se ejerce sobre un inmueble deshabitado. Ese delito grave cometido por Inmoglaciar fue amparado y consolidado por la policía, en una cuestionable actuación que demuestra el doble rasero con el que actúan los poderes, protegiendo los intereses de los más fuertes.

A un año de los hechos, denunciamos de nuevo las actuaciones policiales ejercidas ese día y las semanas posteriores siguiendo órdenes directas de Delegación de Gobierno. Desde el CSOA LA MORADA consideramos que, como máxima responsable de esa actuación policial, la Delegada de Gobierno, Concepción Dancausa, cometió unPREVARICACIÓN por las siguientes razones:

• Porque el 20 de abril de 2016 dio órdenes a las fuerzas policiales para proteger y apoyar a la inmobiliaria InmoGlaciar que acababa de cometer un delito de allanamiento, consolidando ese delito.

• Porque procedió al desalojo improcedente, sin ninguna orden judicial que lo respaldase y desobedeciendo el Auto de un juez que meses atrás había denegado el desalojo del Centro Social.

• Porque, como resultado de su actuación y decisiones, 32 personas fueron detenidas sin haber cometido ningún delito. A día de hoy siguen sin conocer los cargos que se les imputan.

• Porque facilitó a la inmobiliaria Inmoglaciar una escolta de unos 15 agentes policiales y una patrulla policial durante más de dos meses hasta que el edificio al fin fue demolido en junio de 2016.

• Porque, gracias al abuso de poder de su cargo público de Delegada de Gobierno, la especulación inmobiliaria ganó la batalla a la población, una vez más. Donde antes había una centro social autogestionado, ahora hay pisos de lujo.

Un año después del brutal desalojo, las personas que dimos vida al CSOA LA MORADA denunciamos de nuevo porque estamos hartas. Hartas de órdenes políticas en contra de la gente. Hartas de que los poderes económicos se salgan siempre con la suya con la complicidad necesaria de los poderes públicos. Hartas de que a nosotras se nos trate como delincuentes mientras desde la política se protege a los verdaderos delincuentes: los especuladores, los buitres, los corruptos, los que convierten las ciudades en lugares inhabitables, los que gentrifican, los que expulsan, los que rompen el tejido social.

Nosotras, las cientos de personas usuarias y vecinas que estuvimos en el CSOA LA MORADA, queremos denunciar pública y judicialmente estos hechos. Y, sobre todo, queremos reivindicar la LEGITIMIDAD de los centros sociales como bienes comunes, la okupación en su dimensión social y política, y la autogestión como fórmula de vida, de aprendizaje, de empoderamiento de la población y de transformación social. En defensa de los CSOAs que ofrecen alternativas de ocio, cultura, contrapoder y resistencia al sistema capitalista, patriarcal y jerárquico.

Después de un año sin el CSOA LA MORADA, seguimos en la lucha.

¡LA MORADA VIVE!
¡10, 100 1000 CENTROS SOCIALES!